31 de diciembre de 2015

Reseña: Trono de Cristal


¡Qué hay, sonrisitas! Hoy os traigo la reseña del primer de la que creo que es una saga muy prometedora ¿Qué mejor forma de despedir el año que hablando de un libro tan genial?


Autor/a: Sarah J. Maas
Saga: Trono de Cristal I
Nº págs: 528
Editorial: Alfaguara
ISBN: 9788420403670













"Un corazón de hielo. Una voluntad de acero. Te presentamos a una asesina. Te presentamos a Celeana Sardothien. Bella. Letal. Destinada a la grandeza. En las tenebrosas minas de sal de Endovier, una muchacha de dieciocho años cumple cadena perpetua. Es una asesina profesional, la mejor en lo suyo, pero ha cometido una error fatal. La han capturado. El joven capitán Westfall le ofrece un trato: la libertad a cambio de un enorme sacrificio. Celaena debe representar al príncipe en un torneo a muerte, en el que deberá luchar con los asesinos y ladrones más peligrosos del reino. Viva o muerta, Celaena será libre. Tanto si gana como si pierde, está a punto de descubrir su verdadero destino. Pero, ¿qué pasará entretanto con su corazón de asesina?"



Celaena Sardothien, la asesina de Adarlan, es la asesina más famosa del continente. Sin embargo, ha pasado el último año en las minas de sal de Endovier, donde las posibilidades de sobrevivir son escasas y cada día puede ser el último. Cuando pensaba que jamás sería libre, le ofrecen un trato: convertirse en la campeona del rey. Hasta aquí, me parece que la historia tiene un muy buen comienzo ¿Cómo la asesina más famosa y letal de todo el reino ha quedado relegada a una esclava? Reconozco que empecé este libro temiéndome encontrar una versión fantástica y medieval de Los Juegos del Hambre, pues deberá enfrentarse a veintitrés asesinos para convertirse en la campeona del rey y obtener su ansiada libertad (venga ya, hasta en el número coincide). Pero he de decir que sólo se parece en eso y poco más. Celeana obviamente acepta -cómo no iba a hacerlo, le ofrecen la libertad en bandeja de plata- y es aquí cuando comienza la aventura de nuestra joven asesina. El contraste que supone la vida del castillo con lo que la propia muchacha ha vivido es algo digno de mención. Me ha gustado cómo la autora desarrolla el entorno y la vida en el castillo, una enorme construcción de torres de cristal que se elevan hacia el cielo. El torneo por ver quién se convertirá en el campeón del rey es el menor de los problemas de Celaena. Esta línea de la historia queda relegada a un segundo plano, presentándose como el telón de fondo tras el cual transcurre la verdadera trama. El palacio de cristal guarda entre sus paredes numerosos secretos, algunos hace tiempo olvidados, pero es sólo uno el que mantiene el castillo en vilo; algo está matando campeones de una forma tan brutal que no puede ser humano.
Nuestra protagonista deberá enfrentarse a los entramados de la corte, los secretos que esconde el palacio y a guardarse de que nadie descubra su verdadera identidad como la asesina de Adarlan: Lillian Gordiana será su nombre, pues que nadie sepa su verdadera identidad es la única ventaja que tiene.
"A simple vista, se podía llegar a pensar que los ojos de Celaena eran azules o grises, quizá incluso verdes. según el color de su atuendo. Pero si uno des fijaba atentamente, el brillante anillo dorado que rodeaba sus pupilas contradecía aquella primera impresión."
Chaol Westfall, el capitán de la guardia, es un hombre taciturno y desconfiado que está empeñado en no dejarla sola en ningún momento y en partirle alguna que otra costilla durante los entrenamientos. Este es uno de los personajes que más me han gustado, porque me parecía muy real y cercano: sus reacciones son las propias de un verdadero capitán de la guardia (no las de un niñato enamoradizo como tenía previsto) alguien que para proteger a todo el mundo, desconfía hasta de su sombra; no se fía en ningún momento de la asesina, ni se deja embaucar por sus palabras o sonrisas -normal, ¿quién se fía de una asesina, por muy maja que sea?-, aunque he de decir que a veces sus reacciones rayaban lo irritante. Dorian Havilliard, el príncipe heredero del imperio, es un cassanova en toda regla, además del patrocinador de Celaena (¿alguien ha dicho LJDH?) cuya relación con su padre el rey de Adarlan es de todo menos paternal. Dorian, como no, es el perfecto príncipe, de ojos azul zafiro y brillante sonrisa, que le interesan más los libros que las espadas. El personaje del rey sí que me parece interesante, sobretodo porque creo recordar que en ningún momento se menciona su nombre de pila, además de que se le muestra como un hombre frío y calculador capaz de mandarte a la horca como le hayas mirado mal -con éste sí que hay que tener cuidado-.
"Todos tenemos cicatrices, Dorian. Resulta que las mías son más visibles que las de la mayoría."
Otro personaje que puede no tener mucha relevancia -ahora- es, Arobynn Hamel, el rey de los Asesinos y maestro de Celaena que a pesar de de no salir en todo el libro, acabar conociendo aunque sea solo un poquito. un aspecto más misterioso es la vida de la propia Celaena, pues la asesina tiene un pasado, mucho más anterior a Arobynn y los asesinos, del cual no quiere que se sepa nada. Sinceramente, al final del libro todo este pasado se me hace un poco obvio -aunque sólo se intuye, todavía al final del libro no se sabe nada-, pero bueno, es uno de los puntos de la trama que más intriga. Eso y un nombre: Sam. Erilea se nos presenta como un continente en el cual la magia ha desaparecido por completo desde hace diez años por orden del rey, y las garras del imperio se expanden por doquier y amenazan con arrasarlo todo. El punto de los rebeldes no es que me halla parecido muy relevante en el transcurso de la historia, pero al menos no sitúa en el panorama en el que se encuentra el continente. Además, las extrañas marcas del Wyrd son una delas razones por las que no vas a querer levantar la nariz del libro.
Sólo me cabe decir que desde que cogí el libro no he parado hasta acabarlo: la narración no pierde en ningún momento ese toque que te impulsa a seguir, y cada vez descubrimos más cosas acerca de los protagonistas. El hecho de que la historia esté narrada desde el punto de vista de varios personajes tan bien influye, aunque la mayor parte de la historia la seguimos desde el punto de Celaena, con algún que otro "flashback" (no sé si se podrían llamar precisamente flashbacks; nos enteramos de pequeños fragmentos incompletos del pasado de la asesina, sólo lo justo y necesario para que quieras saber más).

Me he enterado de que hay toda una serie de pequeñas historias de las aventuras de la asesina de Adarlan (La asesina y el señor de los piratas, La asesina y la curandera, La asesina en el desierto, La asesina y el submundo, La asesina en el imperio) que si siguen la línea de este libro, me van a durar menos que lo que dura un parpadeo.





*Le pongo cuatro porque no es el primer comienzo de saga/trilogía que me encanta y después la saga en sí me defrauda. Tal vez al siguiente libro -si mantiene el nivel del primero- le ponga las cinco.

27 de diciembre de 2015

Reseña: The raven boys; La profecía del cuervo.

¡Hola, sonrisitas! Hace tiempo que no subo nada al blog, y mucho menos un reseña (creo que sólo he subido una), pero hoy me ha dado la vena crítica así que allá va:
Hoy os voy a hablar del primer libro de la saga The Raven Cycle, La profecía del cuervo. La verdad es que es una saga que llevo bastante tiempo queriendo empezar pero que por una u otra razón no he podido (o no he querido, para ser más exactos)

Autor/a: Maggie Stiefvater
Nº de págs: 424
Editorial: SM
ISBN: 9788467563368






Sinopsis

"Cada año, la noche de San Marcos, Blue Sargent acompaña a su madre al camino de los espíritus para ver a los que morirán en los siguientes doce meses. Sin embargo, este año es distinto: Blue, la única de su familia que no tiene facultades adivinatorias, ha visto a uno de estos espíritus, y eso solo puede significas que es su amor verdadero o que lo va a matar. Él se llama Gansey y es el estudiante más rico del colegio privado más elitista de la zona, la academia Aglionby, cuyo emblema es un cuervo que todos los estudiantes llevan bordado en el jersey. Junto a Adam, un estudiante brillante, celoso del poder económico de sus compañeros; Ronan, un chico con problemas emocionales desde la muerte de su padre, y Noah, el observador taciturno que apenas habla, forman los chicos del cuervo, y están empeñados en descubrir la ubicación de la tumba del último rey galés, Glendower, el Rey Cuervo. Blue sabe que debe mantenerse alejada de ellos, porque los chicos del cuervo siempre traen problemas. Aunque nunca podría imaginarse el siniestro y oscuro mundo que los rodea, donde la magia dejará de ser un juego para convertirse en una amenaza mortal."


Opinión personal

En primer lugar, he de decir que este libro me ha sorprendido, tanto para bien como para mal.

Empecemos por lo malo. La protagonista, Blue, me ha parecido de lo más corriente. No hace más que darle hincapié al hecho de que es la única sin poderes en una familia de videntes ( en plan, " o sea, a mi no me mires que yo no sé hacer nada") y que nunca, nunca, nunca, se enamorará porque desde pequeña le han dicho que matará a su amor verdadero con un beso (no es spoiler; el libro empieza así). La verdad es que con ese comienzo me esperaba una historia de amor más prometedora, con más chicha. Digamos que Blue no me ha entusiasmado especialmente porque la autora no profundiza mucho en este personaje, aunque en mi opinión debería, pues es uno de los pilares de la historia.

"No le interesaba adivinar el futuro de otras personas. Lo que quería era salir al mundo y encontrar el suyo"

Otro punto que no me ha gustado es todo lo relacionado con la historia de Glendower. Ahí es cuando se mete en todo el tema de las líneas ley y el esoterismo (incluso la propia vida de Glendower), pero la autora quiere explicarlo todo tan al detalle que llegaba un momento en el que me perdía. Cabe destacar también que  en algunas partes de la historia no sabía exactamente qué es lo que estaba pasando (porqué un personaje había hecho tal cosa o hechos de la historia que al parecer están relacionados sin motivo aparente).

La narración me parece que está bien, aunque desde que empecé la primera página hasta acabar la última tenía la sensación de que me faltaba un empujoncito para engancharme por completo al libro. A ver, es una lectura fluida, sin capítulos de relleno ni monólogos interminables, pero es -para mí- un libro que si dejas de leer, no es que tengas la imperiosa necesidad de acabarlo porque necesitas saber qué pasa YA.

Y después de lo malo, toca lo bueno. Un aspecto que me ha encantado es lo bien que están definidos los personajes de los chicos del cuervo: la obsesión irracional de Gansey por encontrar a Glendower, un chico que lo tiene todo y que esa búsqueda se le antoja un reto personal (para mí, este personaje no es para echar cohetes, es sólo un niño pijo más); la actitud impulsiva de Ronan y ese "secreto" que tan codiciosamente guarda; los celos de Adam del dinero de sus compañeros (pobrecillo hay que entenderle, él no tiene ni un duro y se pasa el día rodeado de niños ricos), incluso el carácter impulsivo de Noah ( ay, Noah). Lo que más me ha gustado es que ninguno de los personajes es un santo; todos sin excepción tienen defectos. No nos presenta a la típica panda de chavales ricos y guapos que son el perfecto caballero con el que sueña cualquier chica. No, Gansey es estirado, Adam orgulloso al extremo, Ronan muy... arisco, y Noah, puf, es Noah (cuando leas el libro me entenderás)

"En donde hay un dios, hay una legión de diablos"

Este no es el primer libro que leo de esta autora, y a pesar de no era su saga más conocida, la Trilogía Temblor, me esperaba un poco más. También hay que tener en cuenta que este es el primer libro de una tetralogía, así que toda me esperan muchas más sorpresas.
En definitiva, este es para mí uno de los libros que están para pasar el rato en un día lluvioso o en un puente en el que no tienes nada que hacer; entretenido de leer, pero nada del otro mundo.


Puntuación: